Adopción de LOLITA

LOLITA nunca tuvo un hogar, su hogar era la calle, pero sí ha tenido una familia que la ha querido mucho.
Ella se quedó embarazada en la calle y conoció un hogar de acogida donde parío y crío a sus bebés, pero un hogar muy temporal y después de ser castrada tuvo que volver a la calle con su familia. Meses después se incendió donde vivía con su dueño y así fue como Lolita llegó a la protectora.
Hemos esperado todo este tiempo, pensando que su dueño la iba a recuperar, pensando que iba a encontrar un hogar donde ir con ella, pero no ha sido así. Y Lolita no se merece esperar más.

Lolita es un trocito de cielo reencarnado en perro. Es una perrita increíble, súper buena, cariñosa a más no poder. Le encanta jugar con personas y perros, nunca desaprovecha un momento de juego. Es muy muy sociable; puede convivir con machos, hembras, grandes, pequeños... Es un sol.
Es súper súper obediente. Si se pone efusiva queriendo jugar y le das juego, ella sigue el juego; pero en el momento que quieres parar, lo hace al momento.
Es adorable con los niños, una maravilla como los trata y los cuida.
Es una perrita con una energía muy equilibrada, es juguetona, pero a la vez también es muy muy tranquila; todo tiene su momento.

Cómo comentábamos, ella solo ha conocido un hogar el poco tiempo que estuvo de acogida con sus bebés tras dar a luz.
Nos cuentan que le gusta tumbarse en el sofá apoyando su cabeza en tus rodillas. Es súper cariñosa y súper súper tranquila en casa.
Pero tiene ansiedad cuando se queda sola y encerrada y eso sería algo que habría que trabajar con ella. Es totalmente normal, siempre ha vivido libre en la calle; pero no podemos permitir que siendo 95% perfecta, eso sea un impedimento y pierda su oportunidad de ser feliz en un hogar.

Si quieres saber más sobre Lolita, no dudes en contactarnos.
Se merece por fin una estabilidad para siempre.