Adopción de TAKER
¡Adoptado! el
20-5-2023
- Nombre TAKER
- Clase Perro
- Desde 10-3-2023
- Sexo Macho
- Edad 2 años y 2 meses
- fecha de nacimiento 9/2022
- Raza Mestizo
- Tamaño Grande
- microchip 992000002098603
- Localidad Vendrell (Tarragona)
- ID 6801
Descripción
LA TRISTE HISTORIA DE TAKER
A su corta edad, Taker tiene un pasado para olvidar.
El 10 de marzo fue decomisado por #MALTRATO #ANIMAL.
A sus 6 meses, Taker llevaba tiempo malviviendo a la intemperie en una terraza atado a 2 correas muy cortas que le impedían tumbarse y acceder a los cuencos de agua y comida que estaban en la otra punta de la terraza. Una terraza llena de bolsas de basura y bichos a pleno sol.
En cuanto le liberamos de esas correas, Taker iba con ansias por llegar a la calle, caminó contento hasta la furgoneta, disfrutando de la libertad. Esa libertad que le duró tan poco y en seguida se vió encerrado entre las cuatro paredes de una jaula, donde su ansiedad crecía y crecía. Se desbordó y explotó su estrés.
Está sufriendo un infierno encerrado y sobretodo su eterno primer mes aquí ha sido una súper explosión de ansiedad tanto dentro de la jaula como cuando salía al patio.
Ni siquiera jugaba con sus compañeros, aún no sabe lo que es eso, aunque comienza a intentarlo.
Cuando salimos a pasear y se aleja así del estrés del refugio, es totalmente otro perro.
Se calma y pasea tranquilo a la correa. Es súper cariñoso y apegado.
Busca ese amor que le ha faltado en la vida.
Taker no conoce nada de la vida, ha vivido olvidado en una terraza y necesita una familia que le dé la oportunidad de liberarse de su pasado y comenzar su aprendizaje y tranquilidad, lo necesita.
Taker está cumpliendo condena siendo la víctima de esta historia.
TAKER BUSCA UNA CASA DE ACOGIDA O MUCHO MEJOR UNA ADOPCIÓN, NECESITA AYUDA Y SALIR DE AQUÍ.
Si puedes ayudarle, no dudes en contactarnos.
A su corta edad, Taker tiene un pasado para olvidar.
El 10 de marzo fue decomisado por #MALTRATO #ANIMAL.
A sus 6 meses, Taker llevaba tiempo malviviendo a la intemperie en una terraza atado a 2 correas muy cortas que le impedían tumbarse y acceder a los cuencos de agua y comida que estaban en la otra punta de la terraza. Una terraza llena de bolsas de basura y bichos a pleno sol.
En cuanto le liberamos de esas correas, Taker iba con ansias por llegar a la calle, caminó contento hasta la furgoneta, disfrutando de la libertad. Esa libertad que le duró tan poco y en seguida se vió encerrado entre las cuatro paredes de una jaula, donde su ansiedad crecía y crecía. Se desbordó y explotó su estrés.
Está sufriendo un infierno encerrado y sobretodo su eterno primer mes aquí ha sido una súper explosión de ansiedad tanto dentro de la jaula como cuando salía al patio.
Ni siquiera jugaba con sus compañeros, aún no sabe lo que es eso, aunque comienza a intentarlo.
Cuando salimos a pasear y se aleja así del estrés del refugio, es totalmente otro perro.
Se calma y pasea tranquilo a la correa. Es súper cariñoso y apegado.
Busca ese amor que le ha faltado en la vida.
Taker no conoce nada de la vida, ha vivido olvidado en una terraza y necesita una familia que le dé la oportunidad de liberarse de su pasado y comenzar su aprendizaje y tranquilidad, lo necesita.
Taker está cumpliendo condena siendo la víctima de esta historia.
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